jueves, 16 de octubre de 2025

Cambios inesperados...


Dicen que la vida es continuo cambio y va dando giros, vueltas inesperadas que nos toman por sorpresa. Se cierran algunas puertas y otras se abren,  o ventanas,  o quizás resquicios que permiten el paso de la luz. Pero siempre hay algo, aunque a veces no lo veamos, nos neguemos al cambio, o no queramos intentarlo.

Viene a mi recuerdo un cambio inesperado que se me presentó hace muchos años.  Allá por los 80's, se vivía una gran crisis económica acá en Perú, y no era fácil conseguir empleo.  Yo había estudiado secretariado, y al no obtener un puesto, empecé a dedicarme a la repostería.  Preparaba postres, tortas y afines y los vendía a pequeños comercios o personas allegadas. 

A pocos metros de mi casa abrieron una academia de aviación comercial, y la gerente venía semanalmente a llevarse algunos postres y de paso conversábamos. Ana María se llamaba.  A los pocos meses empezaron a escasear los insumos que requería para la preparación.  Esto llevó a que racionaran la cantidad que se podía comprar y mi negocio se puso en riesgo. Sin ingredientes, no había postres.  

Esa semana, al llegar Ana María a comprar, se dio con la sorpresa que  no había podido preparar nada y consternada me dijo "y ahora qué vas a hacer?". Ni yo sabía lo que vendría. Pero ella muy segura me dijo "te vienes a trabajar conmigo", y me citó en su academia. Fui a verla y me dijo que quería prepararme para que enseñe boletaje aéreo.  Me presentó a su coordinador y le dijo "me la preparas bien que va a trabajar con nosotros".

De más está decir que tenía mucho temor, era para mi un terreno desconocido y yo era bastante tímida, y la idea de parame frente a un salón de clases me paralizaba, pero era una gran oportunidad y algo me decía que debía tomarla. 

Así inició mi preparación intensiva,  hasta que un día no llegó a trabajar una profesora  y el coordinador me dijo "ha llegado el momento, ya estás lista". Y ahí estaba yo, entre asustada y decidida dictando mi primera clase.  

Me fue bastante bien para ser mi primera vez, y con esa clase empezó una nueva etapa en mi vida.  Me quedé tres años trabajando a tiempo completo ahí y quedé por siempre agradecida con Ana María que fue un ángel para mi, y confió en mi mas de lo que yo misma confiaba. 

No solo me dio una oportunidad y un trabajo, me dio también autoestima y la certeza de que si quiero, puedo. 

1 comentario:

  1. Muy bonito, las oportunidades hay que aprovecharlas, como se dice el tren de la vida pasa y hay que coger en las estación para seguir adelante.
    Me gusta mucho.
    Un Abrazo

    ResponderEliminar

Me encanta saber que paseaste por acá, y más aún que dejes tu huella....

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...