Estos días he iniciado la tarea de revisar, ordenar, seleccionar y disponer de las cosas de “la tía”, apelativo con el que cariñosamente la llamábamos y que vivió con nosotros su último año.
Al venir ella a vivir con nosotros , dejó cerrado su departamento con el contenido de toda una vida ahí dentro. Admiré mucho en aquel momento su decisión, pues no a todos se nos hace fácil desprendernos del pasado, y de nuestras cosas . Pero ella eligió vivir acompañada y priorizó su tranquilidad (¿o la nuestra?).
Ahora ella no está, y me toca a mí ir a enfrentar el pasado y, más difícil aún, decidir el destino que tomarán sus pertenencias; casi puedo imaginar su sonrisa pícara al verme ahí, en medio de todo sin saber por donde empezar y preguntándome qué es lo que ella desearía.
Me costó algún tiempito animarme; en cierta forma me sentía casi una intrusa, pero tuve que decirme “manos a la obra” y comenzar.
Ella vivió toda su vida con su hermana, por lo que la tarea es por partida doble. Cada cajón abierto y revisado hace volar mi imaginación a otros tiempos, aquellos de su juventud. Guantes de seda, primorosamente envueltos y guardados, mantillas para misa, vestidos elegantes de noche, que me llevan a imaginar grandes recepciones.
Cartas escritas hace más de 50 años por amigas que llegué a conocer, muchas de las cuales partieron ya, que hablan de juventud y vitalidad ; así como muchos álbumes de fotografías en blanco y negro que capturan momentos maravillosos para ellas.
Una hoja de papel sin destinatario ni firma, que describe el momento exacto en que alguién la conoció, y cuya descripción coincide exactamente con esos pormenores que anteriormente había escuchado de labios de ella y que me llevaron a confirmar que eran la versión de “él”, el gran amor de su vida, de aquel momento tan importante para ambos.
Manteles aún almidonados, con grandes servilletas caladas a mano; ropas de baño de los años 40, accesorios para hacer frivolité y macramé, infinidad de libros de crochet y bordado, recetas de cocina escritas a mano, la descripción detallada de cada cena a la que asistían, en fin, un sinfín de objetos que me cuentan íntimos secretos, y que le dan licencia a mi imaginación de volar libremente y apropiarme por un instante de esos recuerdos ajenos.....
Recuerdo a tu tia... recuerdo el dia que hablaste de su desaparición fisica!!!
ResponderEliminarY ahora que te leo, con todas esas cosas que le pertenecian, me hacen acordar mucho a las de mi abuela.
Se ve que eran todas muy parecidas, aún guardo unos guantes preciosos, alguna mantilla, discos de pasta, uyyy tantas cosas y tan bien cuidadas como bien dices...
Asi de duro es, pero tambien asi de bonito andar entre sus cosas y es como tenerla cerca.
Un besote cielo, que tengas una buena Semana Santa!!!
Que lindo post, se nota el cariño que tenías por ella..!
ResponderEliminarBesos
PD: Me encantó la imagen jeje
que hermoso ver a traves de los recuerdos una parte de la vida de esa persona, hay veces que nos perdemos de tanto sin darnos cuenta... mi imaginacion tambien se hecho a volar con esa descripcion...
ResponderEliminarsaludos!
Querida amiga, se como te debes sentir y mas con una entrada anterior hablando una vez desaparecio. Se lo que te abra costado tener que hacer ese paso que al principio que nostalgia y ese sabor agridulce que nos da. Pero se que tu fuerza y tu luz te acompañan en esa labor.
ResponderEliminarBesos querida amiga C.
Difíciles decisiones, amiga... pero en todas las familias ocurre, y hay que hacerlo. Remover recuerdos, deshacerse de pertenencias ajenas, incluso invadir -por necesidad- intimidades... no es un momento grato, verdad?
ResponderEliminarSuerte!!!
Besos.
Que dificil momento, pero a la vez es como entrar al jardin secreto de alguien y poder sentir el amor y cariño que esa persona depositó en el. Me imagino que además de ser dificil es un momento de emociones compartidas, que te dejarán más de alguna hermosa sensación.
ResponderEliminarBesos.
Jooooo, como te entiendo! Yo ahora ando en lo mismo, pero... necesito más tiempo para ponerme a remover su vida. Aunque me la sé de memoria, de revolverle siempre todo de pequeñas.
ResponderEliminarEs una sensación extraña, pero te acerca un poquito más, si cabe a ella.
Un besazo y mucho cariño mi soñadora amiga!
Sin duda tiene que ser momentos difíciles esa inmersión en los recuerdos ajenos y tener que tomar decisiones respecto a ellos, y todo ello acompañado de emociones y sentimientos que se remueven. Piensa que todo esto te va a acercar un poquito más a ella.
ResponderEliminarUn beso
me toco hacer eso conmi suegra, y tomar coraje para vaciar un poco la casa, y es verdad, vuela la imaginacionante fotos en blanco ynegro, ropa un poco entrada en años, y es lindo perotambien triste¡¡¡ porque recordamos que ya no esta tambien¡¡
ResponderEliminarte dejo unbeso¡¡
Seguro que haras lo mejor, lo que tu corazon te diga, recuerdos de toda una vida.
ResponderEliminarUn beso muy fuerte.
Encontrar algo así, es encontrar toda una vida de otro. Siempre me ha producido un consuelo y alegría cuando he encontrado cosas de mis seres queridos. Qué bella descripción de lo encontrado y el sentimiento puesto en ello. Muchas gracias. Un beso
ResponderEliminarDificil tarea tienes por delante amiga, elegir, decidir, que cuesta arriba se te ha de hacer. Lo bueno es que tendrás en tus manos recuerdos vividos y que volveras a vivir con cariño.
ResponderEliminarMucho ánimo!
Pienso que podrías tomar ésta tarea tan emotiva pensando en los momentos felices que vivió esa persona (yo también lo hice hace poco tiempo y no fué nada sencillo)Creo que tu Tía se sentirá feliz que lo hayas hecho vos y no un extraño.
ResponderEliminarAbrazos Soñadora.
Que tiernos sentimientos.
ResponderEliminarUn saludo
Se nota que ha dejadouna huella imperecedera en ti. Una bonita experiencia seguro...
ResponderEliminarBésix
Sé que te costó mucho tomar esa decisión, pero creo que al final no fue tan malo como pensabas no? y a ti que te encanta conocer esos detallitos encontraste algo entretenido del asunto jijiji!
ResponderEliminarUn besote
Melancólico relato que evoca las cosas que dejamos.
ResponderEliminarTu querida tía debe estar feliz en el cielo, viendo cómo te expresas con tanto cariño y valoración de lo que alguna vez fueron sus cosas y sus secretos.
Un abrazo
Hola como se suele decir toda una vida entre cuatro paredes y que habra de todo recuerdos preciosos y otros no tanto animo. Saludos
ResponderEliminarSol, cuantos detalles en común encontramos en las personas de esa edad no?
ResponderEliminarEs una mezcla de sentimientos el que nos llena al andar entre sus cosas, pero creo que al hacerlo con cariño y respeto adquiere un significado especial!
Besitos,
Niriel, en el año que vivió con nosotros se ganó mucho cariño de mi parte, pude conocerla de verdad!
ResponderEliminarBesitos,
Ni ëis, es bonito ver a través de los ojos de otra persona, se encuentran nuevas perspectivas.
ResponderEliminarBesitos,
Anna, probablemente lo más difícil fue decidirme a empezar. Una vez iniciado es casi una aventura, de la que disfruto de la mano de mi imaginación.
ResponderEliminarBesitos
Si Diávolo, en especial ese invadir intimidades, pero se intenta hacer con mucho respeto.
ResponderEliminarBesitos y gracias!
Joana, lo has graficado muy bien. Es una combinación de sentimientos, pero creo que la balanza se inclina positivamente.
ResponderEliminarBesitos,
Latrís, en estos casos el tiempo es un aliado importante! Pasito a paso debemos ir!
ResponderEliminarBesitos,
Si Asun, al conocer tan de cerca sus cosas, siento que la conozco y la comprendo mejor aún.
ResponderEliminarBesitos,
Silvia, tú también pasaste por esto! Que mezcla de sentimientos no?
ResponderEliminarBesitos,
Luisa María, siempre escuchando al corazón, es la manera de hacer estas labores no?
ResponderEliminarBesitos,
Angelo, en verdad que es un sentimiento especial el que genera esta labor. Y si, definitivamente el cariño está presente.
ResponderEliminarBesitos,
Gatita, lo más difícil fue empezar, y ahora también se me hace duro decidir! En fin, a mirar pa'lante!
ResponderEliminarBesitos,
Pienso lo mismo Adriana, uno le pone cariño a esta tarea!
ResponderEliminarBesitos,
Norma, gracias por tu visita y comentario! Pasaré a visitarte, bienvenida!
ResponderEliminarLuis, efectivamente, no pensé que calara tanto! Pero en los sentimientos no mandamos.
ResponderEliminarBesitos,
Si mi Luni Va, me gusta armar historias, y ahí encontré muchos "argumentos" ! jejeje
ResponderEliminarBesitos,
Querido Ojoavizor, es la conclusión inevitable no? También quedé pensando en cuantas cosas quedan cuando llega la hora de la partida!
ResponderEliminarBesitos,
Si Nany, efectivamente de todo. Y es bonito intentar reconstruir las piezas!
ResponderEliminarBesitos,
La sonrisa de Hiperion, gracias mil por tu comentario y visita! Me alegra que te hayas sentido bien por acá. Pasaré a visitarte!
ResponderEliminarBesitos,
Qué bonita entrada.
ResponderEliminarSé que te ha costado, pero una vez que has empezado, debe de ser toda una aventura fascinante. Se nota el cariño y la ternura con la que hablas de ella. Ha sido muy afortunada por compartir el último año de su vida con vosotros.
Un abrazo.
Sofía, es cierto, es una aventura y voy conociendo más detalles que me llevan a conocerla un poquito mejor.
ResponderEliminarBesitos,
que interesante! imagino algo asi como un libro abierto, una historia esperando ser escrita, una vida por volver a nacer... q apasionante, casi un museo, una tarea de titanes, no tendria corazon para escojer..
ResponderEliminarCaminante, en verdad una tarea difícil, pero como bien dices apasionante, vas descubriendo detalles y conoces mejor a la persona.
ResponderEliminarBesitos,