El joyero revisó cada uno, pieza por pieza, engranaje por engranaje. Pero sólo uno de los relojes tenía arreglo, el que pertenecía al viejo maestro de la escuela pública; todos los demás eran ya máquinas inservibles.
El reloj del maestro era un legado de su padre; posiblemente por eso el día en que se detuvo marcó para ese hombre un momento muy triste. Sin embargo, en lugar de dejarlo olvidado en su mesita de luz, el maestro cada noche tomaba su viejo reloj, lo calentaba entre sus manos, lo lustraba, daba apenas una media vuelta a la tuerca y lo agitaba deseando que recuperara su andar. El relo parecía querer complacer a su dueño, que durante algunos minutos se quedaba escuchando el conocido tictac de la máquina. Pero enseguida volvía a detenerse.
Fue este pequeño ritual, este ocuparse del reloj, este cuidado amoroso, lo que evitó que ese reloj se trabara para siempre. Fue la suma de la motivación y la perseverancia del maestro lo que salvó a su reloj de morir oxidado.
Autor desconocido
El amor es la mayor fuerza curativa que podemos encontrar.
ResponderEliminarBesos
El amor y la perseverancia, mantuvieron viva la esperanza en el corazón de este maestro.
ResponderEliminarMuy lindo, un fuerte abrazo.
Totalmente de acuerdo. La motivación mueve nuestras vidas y hace que los días no sean grises. Nos da fuerzas para luchar por algo, un sueño, una aspiración, un deseo etc.....
ResponderEliminarLa perseverancia es el poquito a poco, el pasito a pasito que hace que consigamos lo que queremos.
Si encima hay amornpof medio, este actúa de potenciados de multiplicador de los dos anteriores.
Muy bonito soñadora. Feliz finde
Amompof= amor por
ResponderEliminarMi querida Soñadora: Es una preciosa y tierna historia que nos demuestra que el amor con mayúsculas siempre realiza milagros y es tan hermoso amar...
ResponderEliminarBrisas y besos.
Malena
P.D/ Escribe más a menudo pues se te echa en falta. El espacio de Soñadora tiene que estar siempre lleno de letras.
Creo que esos pequeños cuidados pero con tanto amor fue lo que salvó de alguna manera la subsistencia de ese reloj.
ResponderEliminarDe la misma manera pasa con las personas... solo un poco de amor, detalles que le hacen saber que estamos pendientes, hacen que sobrevivan al tiempo.
Bellísimo relato.
Besos a tu alma bella!!!
muy expresivo el cuento.
ResponderEliminarA veces cuesta tanto la perseverancia. Y es curioso, cuando despues de insistir, al final se arreglan las cosas, se medio olvidan los esfuerzos dedicados y los momentos de duda.
me acordaré del reloj en los momentos de "tiro la toalla"
Gracias¡
Precioso Soñadora.
ResponderEliminarEl amor todolo puede!
Un fuerte abrazo.
Es que si al cariño le unes los cuidados y la constancia, ¿cómo no va a salir todo a flote, verdad?, ya sabes, si la fe mueve montañas, el amor mueve al mundo, al mundo entero.
ResponderEliminarMil besitos gordotes
Bonita forma de explicar la fuerza que tiene el amor, y lo que éste puede conseguir. Besos.
ResponderEliminarEs cierto todos necesitamos una pequeña caricia diaria, de lo contrario, el abandono, os oxida.
ResponderEliminarUn besito
Que bonito!
ResponderEliminarGracias por compartirlo con nosotros. Es de esas historias que te dejan con na sonrisa en la boca. La fuerza del amor!
Un abrazo fuerte!!
El amor, la perseverancia y la motivación son claves del éxito.
ResponderEliminarAbrazo y gracias por el relato. Jabo
Me ha gustado mucho la historia. Creo que no hay que dejar las cosas caer por obvias, sino seguir alimentando las ilusione y demostrando nuestro amor.
ResponderEliminarUn abrazo
Nada más que decir. Es una maravilla encontrar estos comentarios.
ResponderEliminarUn abrazo
El amor es el motor que mueve el mundo, que sería de nosotros sin amor.
ResponderEliminarHermoso relato amiga.Bikiños!
Qué bonita historia, Soñadora, es preciosa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un gusto venir a leerte y disfrutar de tu bella entrada,,,Besitos y una linda tarde...
ResponderEliminarYa lo creo que si Asun, hay que prodigarlo a manos llenas.
ResponderEliminarBesitos,
Carmen Rosa, excelente dupla esa del amor y la perseverancia, rinde buenos frutos.
ResponderEliminarBesitos,
Chus , el amor unido a la perseverancia nos dan fuerza aún cuando creemos no poder.
ResponderEliminarbesitos,
Mi querida Malena, tus palabras llenas de amor son un buen acicate para mí, gracias!
ResponderEliminarBesitos,
Querida Alma, que importante que es el amar no? Amarnos a nosotros también lo es!
ResponderEliminarBesitos,
Miriam, tienes razón, también recordaré el reloj en esos momentos.
ResponderEliminarBesitos,
Adriana, una gran fuerza es el amor!
ResponderEliminarBesitos,
Apm, que bonito lo has explicado, el amor mueve al mundo!
ResponderEliminarBesitos,
Pilar, estos cuentitos suelen explicar muy bonito estas cosas tan importantes!
ResponderEliminarBesitos,
Camy, una caricia, una sonrisa, un abrazo, un rayito de sol, una palabra!
ResponderEliminarBesitos,
Monik, me encantó verte por acá y en especial ver esa gran sonrisa!
ResponderEliminarBesitos,
Jabo, unidos obran milagros!
ResponderEliminarBesitos,
Delia, dices una gran verdad, nunca es demasiado el amor.
ResponderEliminarBesitos,
Angelo, gracias por tu visita, siempre me alegra verte por acá!
ResponderEliminarBesitos,
Esther, que motor tan bonito el que tiene el mundo no?
ResponderEliminarbesitos,
Sonia, también me encantó cuando la lei en un libro de Jorge Bucay.
ResponderEliminarBesitos,
Ilusión, gracias por tus palabras y tu visita!
ResponderEliminarBesitos,
Este cuento si no me equivoco es de Mamerto Menapace. Tiene unos cuentos muy lindos, de esos que a uno de lo dejan pensando!
ResponderEliminarGracias por compartirlo!!
Besos
Vivi, no imaginas el regalo que me has hecho mencionando a Mamerto Menapace, no lo conocía y estoy encantada con sus cuentos, gracias!
ResponderEliminarBesitos,