Estos ultimos días me pregunto ¿Porqué la muerte siempre nos toma desprevenidos? Por mas que nos preparemos, por mas que sepamos que todos vamos a partir, por mas que hagamos propósito de que no nos vuelva a suceder, zas! llega y nos sorprende arrebatandonos a algun ser querido que pensabamos siempre estaria ahi.
Peor aun, que pensabamos no necesitar cerca...... o que no extrañariamos su presencia, pero eso es falso, y recien cuando esa persona no esta, sentimos su ausencia o apreciamos su presencia que ya no esta.
Era una persona con la que solia compartir un par de horas a la semana, tomando un cafe en casa y escuchando sus interminables historias, mitad ciertas, mitad fantasias, pero contadas con tal realismo que uno llegaba a confundir realidad con ficción y nunca quedaba claro cuales eras las partes ciertas y cuales solo estaban en su imaginación.
Sufrio en el hospital tres largos meses, en lo que algo dentro de mi me decia que no se recuperaria, era como si yo tuviera la certeza de que no lograría salir del hospital, pero a la vez se le veia con tantas ganas de vivir , con tanta fortaleza que uno dudaba si tanta fuerza interior obraria el milagro de su total recuperación, pero la vida le jugó una mala pasada y no logro recuperarse, y esa persona que disfrutaba tanto de la vida , se fue, dejando un vacio a su alrededor, pero a la vez , dandonos la sensación de que descansó, y quizas ahora esta aun mas cerca de cada una de las personas que lo queriamos.
Quizas es un angelito que ronda por aca, quizas forma parte de las voces interiores que habitan en mi y me dictan ahora escribir estas palabras, quizas solo ya no está, pero siento a la vez la alegria de recordar las horas compartidas y las palabras atesoradas.
Era el rey de las cucharas, teniente sonrisitas para algunos, bueno como el pan para otros, "no tiene remedio" para alguien mas, su corazon era capaz de cualquier cosas con tal de ayudar a otros, una especie de Robin Hood moderno, pero que lamentablemente no tenia limites, en fin, donde quiera que estes mi querido cuña, gracias por haberme permitido tener un casi hermano tan cerca.
¡Se te quiere mucho!
Siempre tendremos un ángel cerca. Estoy segurísima.
ResponderEliminarUn beso y gracias por estar ahi.
Bienvenida seas a este humilde refugio, en el que las palabras brotan mezcladas con los silencios. Y gracias por tu comentario.
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