sábado, 24 de marzo de 2018
Silencio y paz...
Difícilmente transcurre un día en nuestra rutina en que guardemos silencio. Siempre tenemos algo que decir, algún comentario que hacer, alguna respuesta que dar, alguna réplica o reclamo que sale casi instintivamente y sin mucho cavilar.
Esta última semana ocurrió que mi voz se esfumó, desapareció, decidió tomar un descanso y enmudeció. Al intentar hablar, muy aparte del esfuerzo que esto le ocasionaba a mi garganta, solo lograba emitir algún que otro sonido con una voz que no identificaba como propia y alternada con sílabas silenciosas por lo que tuve que optar por callar la mayoría de veces y hablar solo lo mínimamente indispensable.
Y resultó toda una experiencia. En mi mente si que hablaba, pero al no pronunciar las palabras, me ponía a reflexionar sobre lo que quería decir y me di cuenta cuan importante resulta en ocasiones guardar silencio y escuchar. Guardar silencio y acompañar. Guardar silencio y comprender. Guardar silencio y no sentenciar. Guardar silencio y simplemente estar.
Ahora ya mi voz empieza a sonar, pero tras esta experiencia/reflexión espero saber también a veces guardar silencio y escuchar.
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Gran reflexión y profunda conclusión. Aunque yo te creo de escuchar con total generosidad.
ResponderEliminarDeseo que ya la hayas recuperado al 100%
Un gran abrazo!
Sara querida, muchas gracias. Creo que ya estoy al 90% 😊!
EliminarUn fuerte abrazo!
Hay ocasiones en que damos mucho más valor a las palabras cuando se quedan en silencio y sin voz.
ResponderEliminarValoramos cada una de ellas, reflexionamos sobre su trascendencia y pulimos a conciencia para darnos cuenta de todo su poder.
Siempre son de gran importancia momentos de reflexión, esta Semana Santa puede ser el momento ideal para ello.
Cariños.
kasioles
Kasioles, gracias por tus palabras. Deseo que estés teniendo una bonita semana santa.
EliminarBesos!
Muchas veces en la soledad en la que vivimos mantenemos este silencio el cual es bueno para nuestra tranquilidad, espero que ya estés recuperada, un abrazo.
ResponderEliminarMari, la recuperación va por buen camino, gracias!
EliminarUn abrazo!