Un viaje hacia tu interior.....

Hay momentos en que sientes cierta desazón interior, crees que las cosas no marchan como esperabas, o no consigues sonreir debido al peso de las preocupaciones.

En esos momentos, cierra por un instante los ojos y respira profundamente, siente como el aire ingresa a tu cuerpo e imagina como cada rincón de él se nutre de oxígeno. Mientras interiormente visualizas cómo se oxigena cada zona, analiza si tienes algún dolor o malestar físico, siente cada parte de tu ser.

Concéntrate luego en tu mente, ¿qué problema te agobia? ¿cuál es tu mayor preocupación? ¿qué es aquello que impide tu tranquilidad? Una vez identificado, piensa si realmente merece tanta importancia y en cómo solucionarlo.

Ahora, manten tus ojos cerrados e imagina que estás en algún lugar que te traiga mucha tranquilidad, puede ser quizás el campo, una cascada, el mar, un río, un nevado, cada quién elegirá su lugar especial, abandona tus problemas y preocupaciones ahí y disfruta del paisaje que te rodea, y siente como todo tu ser se llena de paz y armonía.

Abre los ojos lentamente y siente como ahora estás más liviano y puedes así empezar un nuevo día con optimismo y tranquilidad.

¡Inténtalo............vale la pena!