Nunca terminará de sorprenderme lo vívidos que permanecen los recuerdos en nuestra memoria. El otro día escuchaba la radio y habían invitado a un cantante de rock nacional de la década del 70 al programa, y entre otras cosas mencionaron un concierto realizado en el parque Kennedy de Miraflores.
Fue escuchar ésto y verme a mi misma acudiendo con una mezcla de curiosidad y temor a ver el estrado que estaban levantando en medio del parque, mientras afinaban sus instrumentos y ensayaban el tema "Radar de Amor". Jamás había estado en un concierto de rock en vivo y para mi corta edad era toda una novedad. A lo sumo había ido a la Concha Acústica del Parque Salazar a ver ensayos de música clásica con mi abuelita.
Corría el año de 1975, y hacía poco nos habíamos mudado cerca de ahí. En realidad esa década trajo a mi vida muchos cambios. Después de algún tiempo viviendo sóla con mi abuelita y mi hermana nos mudamos junto a mis papis. Mi hermana mayor acababa de viajar a Suiza, donde se casaría y se establecería, cosa que me llenaba de tristeza.
Pero por otro lado recuerdo que mi hermano tenía una boutique de ropa en pleno centro de Miraflores, y me ofreció ir a ayudar por las tardes a cambio de una propina, lo cual me hacía sentir la mar de importante. Definitivamente una época de sentimientos encontrados y extremos.
Al llegar del colegio a casa, almorzaba a las voladas, me cambiaba el uniforme escolar, hacía algo de tareas y salía disparada hacia la tienda. Justamente estaba ahí el día del famoso concierto y por ello fue que pude ver todos los preparativos. Por supuesto que al día siguiente en el colegio tuve que contar todos los detalles que me había tocado ver en primera fila.
Termina la entrevista en la radio y vuelvo a la realidad, tengo que preparar algunas facturas y despachar un par de pedidos. Es tiempo de continuar en el presente, pero fue muy grato darme ese paseillo por el pasado...