El único sobreviviente de un naufragio llegó a una deshabitada isla. Pidió fervientemente a Dios ser rescatado y cada día divisaba el horizonte en busca de una ayuda que no llegaba. Cansado optó por construirse una cabaña de madera para protegerse de los elementos y guardar sus pocas pertenencias. Pero un día, tras merodear por la isla en busca de alimento regresó a la cabaña para encontrarla envuelta en llamas con una gran columna de humo levantándose hacia el cielo. Lo peor había ocurrido; lo había perdido todo y se encontraba en un estado de desesperación y rabia.
-¡Oh Dios!, ¿cómo puedes hacerme esto?, -se lamentaba.
Sin embargo al amanecer del día siguiente se despertó co
n el sonido de un barco que se acercaba a la isla. Habían venido a salvarlo.-¿Cómo supieron que estaba aquí?, -preguntó el cansado hombre a sus salvadores.
-Vimos su señal de humo, -contestaron ellos.
Es muy fácil descorazonarse cuando las cosas marchan mal. Recuerda que cuando tu cabaña se vuelva humo, puede ser la señal de que la ayuda está en camino.
CUENTO SUFI
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Todo ocurre por alguna razón, que a nosotros en ocasiones nos cuesta "ver", pero las señales están más cerca de lo que pensamos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Soñadora!
Confio en mis señales de humo no tarden en ser vistas, historias como esta ayudan a mantener la esperanza.
ResponderEliminarBesinos.
Lo malo que estas historias son solo eso historias. En la vida real no pasan esas cosas. Yo nunca le cuestiono a Dios el porque?
ResponderEliminarUn abrazo
Vaya, me ha encantado el relato! muy bueno ah! y muy cierto el mensaje no siempre son las cosas lo que parecen y Dios no nos abandona.
ResponderEliminarUn besote y me gusta la historia para el día de hoy, habrá que dedicársela a Oko
Dios vive en nuestros corazones y de ahí la verdadera respuesta.
ResponderEliminarUn abvrazo.
Eso dicen que cuando crees que todo lo has perdido, nace el nuevo ave fenix. Espero que a ti nunca te deje sola, y a mi que pronto aparezca en el horizonte.
ResponderEliminarBesos querida C.
Hay momentos en los que la desesperación del momento no nos deja ver las señales de humo, pero seguro que existen. A veces necesitamos cierta perspectiva para apreciarlas.
ResponderEliminarUn besote Soñadora
esto viene genial para los que como yo por momentos ,pensamos que la ayuda tarda demasiado¡¡¡¡
ResponderEliminargenial entrada
besitos ¡¡¡¡
Que bella historia y que buena reflexión la que nos deja!!
ResponderEliminarBesitos!
Me encantó tu historia Soñadora... bueno, por partes, que lo primero es lo primero.
ResponderEliminarComo sabes, he estado una semanilla sin entrar a leeros, ya sabes, la Feria de Abril, que no me dejaba tiempo pa ná. Ahora, ya pasada la fiesta, he venido a leeros y te diré que me ha encantado esa entrada de tu cumple: aún con retraso, Felicidades Soñadora, felicidades por esos 48 espléndidos años, felicidades por esa entrada tan entrañable, y, como tu misma decias, estoy segura que te dejaste mimar por los tuyos y lo celebraste y lo pasaste muy pero que muy bien... llegadas a una edad, hay gente que no quiere celebrar sus cumpleaños, pero me parece un error, nada más hermoso y maravilloso que cumplir años, los que sean, porque, cumplirlos es señal inequívoca de que estás viva, !que triste los que no lleguen a cumplirlos!
Y, en cuanto a la historia del naufrago, pues, me ha encantao... me encantan todas esas historias reflexivas qu nos cuentas, porque son certeras y de una profundidad evidente: muchas veces creemos que hemos perdido todo y que la desgracia nos consume y sin embargo es la señal de una ayuda liberadora... en España hay un refrán que dice "no hay mal que por bien no venga"
Un besote Soñadora, uno bien gordito y tremendamente sonoro
Muchas veces nos lamentamos por todo lo que nos ocurre sin pensar que quizás ocurra por algún motivo. Nos cuesta comprender que de los peores momentos siempre se sacan lecciones.
ResponderEliminarUn buen ejemplo de como afrontar la vida con optimismo y sabiduría
Me ha encantado este cuento.
Un beso Soñadora
Hola muchas veces la desesparación no nos deja ver lo que podemos hacer. Saludos
ResponderEliminarCuando estás en medio del fuego, es difícil de entender. Pero te prometo que siempre hay razones.
ResponderEliminarBesos de alguien que descubrió las suyas durante el peor de los incendios.
Yo suelo decir (a los demás) cuando les pasan cosas así, feas, que: "No hay mal que por bien no venga." Es un refrán que aquí se utiliza mucho, pero ufff...aplicarmelo yo, es otra historia bien diferente. No se ve la luz cuando estás mal, de ninguna manera puedes ver que cuando te pasa algo malo, es porque después llegará algo bueno. Aunque en el fondo sabemos que suele ser así.
ResponderEliminarBella tu historia :)
Un abrazo!
Hermoso!!!!
ResponderEliminarY que cierto, no?
Es que todo depende de como lo miremos, y lo que nos puede parecer negativo, trae algo bueno, como tambien sucede al reves, ahi, ya no es tan bueno....
Saludos.
Hola Soñadora,,,,,bonito cuento!!!! muchas veces ante las adversidades de la vida,,,pueden surgir cosas buenas y maravillosas,,,,
ResponderEliminarBesitos y lindo día.....
Esto me recuerda a una frase que suelo decir mucho: "No hay mal que por bien no venga". El mal: el incendio, el bien: la ayuda.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario, Soñadora, y por alegrarte por mi.
Besitos.
Linda historia con moraleja incluida. Es cierto pero la verdad nes que cuando alguien esta metido en un grave problema le resulta muy dificil ver y entender la parte positiva del asunto, si es que la tiene, claro pero no deja de ser una lección a tener en cuenta para esos momentos de agobio en que todo se ve negro negro.
ResponderEliminarBesos. Eritia
Yo todavia me sigo preguntando ¿quién le habrá incendiado la cabaña? je je je.
ResponderEliminarMuy bonita tu historia.
¡Dejo un saludo afectuoso!
Soñadora, es cierto, el mundo no se acaba en un problema nuestro, sigue adelante y con el tiempo te das cuenta de que sucedió lo que debía..
ResponderEliminarUn beso y feliz fin de semana
Adriana, hay momentos en que el motivo es claro, en otros cuesta más trabajo hallarlo, pero un primer paso es aceptarlo.
ResponderEliminarBesitos,
Fabia, uniremos fuerzas porque así sea!
ResponderEliminarBesitos,
Chus, tampoco suelo cuestionarlo, creo que es más saludable aceptar y confiar.
ResponderEliminarBesitos,
Luni Va, aunque a veces cueste entender las cosas creo que siempre suceden por algo no?
ResponderEliminarMe gusta la idea de dedicárselo a Oko, aunque creo que en estos días escribiré un post de ella, anda rondando mi mente.
Besitos,
Olga i Carles, si creemos en que Dios vive en nuestros corazones será más fácil aún el aceptar los sucesos de cada día!
ResponderEliminarBesitos,
Anna, busca con calma, es muy probable que ya esté ahí, en tu horizonte!
ResponderEliminarBesitos,
Latrís, hay momentos en que la ofuscación no nos deja ver con claridad, en esos casos es prudente darle tiempo al tiempo y no actuar impulsivamente.
ResponderEliminarBesitos,
Silvia, a veces esperamos determinada ayuda , y cuando llega en otra forma no la distinguimos.
ResponderEliminarBesitos,
Niriel, es bueno entender que generalmente las cosas suceden por algún motivo.
ResponderEliminarbesitos,
Querida Apm, ante todo mil gracias por tu saludo de cumpleaños, yo creo que cada día que Dios nos da vida hay que celebrarlo y agradecerlo. Y sí, ya lo creo que me dejé mimar por los míos que me tienen mal acostumbrada!jejeje
ResponderEliminarRespecto a la historia, me gusta el refrán que mencionas, hay cosas que nos suceden y no logramos comprender al principio pero pasado un tiempo se esclarece y vemos mejor!
Besitos,
Fael-lo, no siempre es fácil comprender o aceptar, y uno piensa y piensa tratando de aprender de la situación, pero como dice el dicho, cuando una puerta se cierra es porque otras se están abriendo.
ResponderEliminarBesitos,
Nany, así es. Por ello es mejor serenarnos antes de tomar una decisión errada.
ResponderEliminarBesitos,
Cassiopeia, gracias por tu testimonio, si creo en lo que dices.
ResponderEliminarBesitos,
Gata, es verdad, cuando uno está involucrado no puede ver las cosas con claridad, o tener la serenidad de buscar dónde está la luz, en esos casos, hay que darle un tiempito antes de tomar una decisión.
ResponderEliminarBesitos,
Cheli, gracias por dejar tu huella por acá, bienvenida!
ResponderEliminarMucho influye también nuestro estado de ánimo cuando nos ocurren las cosas, por ello es conveniente intentar vivir con serenidad.
Besitos,
Ilusión, muchas veces lo que nos parece terrible termina siendo bueno!
ResponderEliminarBesitos,
Bluemoon, ese es un buen dicho! Aunque no siempre tengamos la lucidez para aplicárnoslo!
ResponderEliminarBesitos,
Eritia, por supuesto que no es fácil, y no siempre lograremos encontrarle el lado bueno a las cosas, pero hay momentos en que esa actitud es de gran ayuda.
ResponderEliminarBesitos,
Armando, creo que habrá que hacer una investigación al respecto! jejje
ResponderEliminarBesitos,
Camy, generalmente es así, sucedió lo que debía suceder, aunque duela un ratito.
ResponderEliminarBesitos y un lindo fin de semana para tí también!
Como se suele decir: No hay mal que por bien no venga. Siempre debemos de intentar ver el lado positivo de las cosas.
ResponderEliminarBesos
Completamente de acuerdo contigo Asun, aunque cueste encontrarlo hay que buscarlo!
ResponderEliminarBesitos,
De dónde sacará esta mujer estas historias tan ejemplificantes!!!!...son buenísimas....no hay mal que por bien no venga....
ResponderEliminarBesitos.
Preciosa historia!! Siempre digo "las cosas se dan por algo"
ResponderEliminarAun en medio de haberlo perdido todo, Dios nunca se olvida de nosotros!!
Besos
Ana, tengo mis expedientes secretos guardaditos! jejeje. Suele funcionar así no? Por muy duro o incomprensible que nos resulte algún suceso, más adelante las cosas mejoran.
ResponderEliminarBesitos,
Vivi, es verdad, y es bueno poderlo comprobar de vez en cuando, nos enseña a apreciar lo verdaderamente esencial.
ResponderEliminarBesitos,
buen mensaje y recibido a tiempo! se lo paso a mis hermanos.. Gracias!
ResponderEliminarMe alegra que llegara en momento oportuno el mensaje!
ResponderEliminarBesitos,
Muy buena lección. Soñadora.
ResponderEliminarSiempre hemos de estar dispuestos a aprender hasta de los fracasos.
Un abrazo y feliz día.
Juan Antonio
Juan Antonio, aunque a veces demoremos un poco en ver el lado positivo de lo que nos ocurre,ahí está!
ResponderEliminarBesitos,